La Comisión de Universidad, Innovación y Transformación Digital ha visitado hoy, a instancias de todos los grupos parlamentarios, el campus de la UNED en Pamplona.

La UNED, una de las sedes académicas pioneras del Estado, abrió sus puertas en 1973 con 326 estudiantes. En este curso, este centro a distancia cuenta con 126 profesores tutores y casi 7.800 estudiantes, y ofrece la posibilidad de matricularse hasta en 30 grados, 11 grados combinados, 17 microtítulos y 80 másteres. Los grados más demandados este curso son, en este orden, Psicología, Derecho y Geografía e Historia.

Los Parlamentarios/as que han asistido han sido Ángel Ansa, Iñaki Iriarte (G.P. UPN), Kevin Lucero (G.P. PSN), Arantxa Izurdiaga (G.P. EH Bildu), María Solana (G.P. Geroa Bai) y Miguel Garrido (Contigo-Zurekin).

La delegación del Parlamento ha sido recibida por Teresa Imízcoz, directora del centro asociado de la UNED en Pamplona.

El objeto de la visita, enmarcada en la celebración de su 50º Aniversario que concluirá con la entrega este diciembre de la Medalla de Oro del Gobierno de Navarra, ha sido dar a conocer la situación actual del centro, así como todo el amplio rango de programas académicos que tienen previsto desarrollar.

Tras una visita por sus instalaciones, donde se ha podido palpar la actividad universitaria, principalmente del alumnado senior -programa para personas mayores de 55 años-, ha tenido lugar una exposición de sus logros y objetivos en la Sala de Juntas del centro.

Allí, los Parlamentarios y Parlamentarias han escuchado de boca de su directora, su clara intención de reforzar la idea de una Comunidad en la que están presentes tres universidades.

Teresa Imízcoz ha dibujado la imagen de la Universidad Nacional a Distancia, como social e inclusiva. En ella no existen los numerus clausus, ni notas de corte, ni desventajas económicas, al ser pública, ni se discrimina por edad. “Nadie se ve limitado a la hora de matricularse en la carrera deseada. Yo la considero la universidad de las segundas oportunidades, incluso de las terceras”, ha afirmado.

En cuanto a la inclusión, la UNED concentra el mayor número de alumnado con discapacidad. “Se hace un gran esfuerzo para adaptar tanto materiales como exámenes para personas con hándicaps visuales o de movilidad”. El acceso al conocimiento está garantizado, además, para las personas privadas de libertad, ya que tiene la competencia de los estudios universitarios para los centros penitenciarios, otra de las singularidades de la Universidad a distancia.

Del mismo modo, la directora ha querido desmontar dos conceptos que se incluyen en el acrónimo de UNED: “Ni es a distancia, ya que se trata de un modelo semipresencial, con clases a las que se puede acudir o que se retrasmiten en directo, ni es nacional, en el sentido de que, salvo la vinculación estrictamente formal de los estudios reglados oficiales, tiene autonomía jurídica propia para formar a sus alumnos ofreciendo una amplia oferta de itinerarios”.

El perfil de los y las estudiantes es muy variado, pero en su mayoría son personas que compaginan vida laboral y familiar con el afán por formarse, ya sea por razones profesionales o simplemente por la experiencia del conocimiento.

Y para ellos y ellas, se impulsan todos los proyectos desde el equipo directivo y académico de la UNED.

“En primer lugar, queremos estrechar lazos con las otras universidades, potenciando las virtudes y compensando las carencias curriculares entre centros. Hacer compatibles las matriculaciones en las distintas asignaturas que se ofertan, mediante el trasvase de alumnos en créditos de libre configuración”. Así se ha hecho ya con la UPNA mediante un convenio. “¿Por qué un estudiante de la UPNA que quiere formarse en Humanidades no podría hacerlo eligiendo alguna asignatura en la UNED? Ahora ya va ser factible”, ha señalado. Esta es una posibilidad que quiere extender a la Universidad de Navarra.

Los Parlamentarios y Parlamentarias se han interesado por la oferta de “microgrados”, estudios que hacen posible profundizar en un área sin empeñar el tiempo y el esfuerzo que hay que dedicar a una carrera completa. Esta formación ha sido muy bien acogida y durante el último curso ha obtenido una respuesta abrumadora por parte del alumnado.

Otro de los programas que la UNED quiere potenciar son los cursos de verano, que este año se han llevado a la prisión de Pamplona. Dentro de esta idea de imbricarse en la sociedad y llegar a sus capas más desfavorecidas, se enmarca el “Programa de competencias para la integración social de la poblaciíón migrante”, que tendrá continuidad en cursos venideros y que se ramificará en tiempo de ocio y talleres de lectura y conversación.

Ampliando sus vínculos, se han firmado acuerdos con Colegios Profesionales para que en las áreas de Educación Social y Psicología, se puedan realizar prácticas y labores de mentoría entre profesionales y estudiantes. También está en perspectiva la posibilidad de crear grupos piloto en las localidades de Elizondo y Estella, con el fin de ofertar cursos académicos. Este último proyecto desarrollaría las relaciones entre la UNED y los Ayuntamientos.

El germen de la colaboración entre entes locales y la institución universtitaria surge de una idea inicial que se ha dado en llamar Cátedra de Inteligencia Emocional. “En el ámbito de las emociones nos lo jugamos todo, lo hemos visto en la pandemia. La inteligencia emocional lo impregna todo: nuestras relaciones laborales, familiares y de pareja. Queremos trabajar las emociones desde la base y en edades tempranas. Con este motivo hemos firmado un convenio con el Ayuntamiento de Pamplona para desarrollar cursos de esta cátedra en las escuelas infantiles (niños), la Casa de la Juventud (jóvenes) y Civivox (adultos)”, ha declarado Teresa Imízcoz.

Por último, la directora ha finalizado avanzando su intención de crear un centro de orientación, formación y empleo para el alumnado, que tenga en cuenta sus necesidades, habilidades formativas y su disposición de tiempo para que el paso por la UNED culmine con éxito.

Concluida la reunión, los Parlamentarios y Parlamentarias han convenido que la UNED es una gran desconocida para los ciudadanos, aunque existe una oferta académica, reglada y no reglada, muy viva y al alcance de cualquier persona, que se han comprometido a divulgar y estimular.

En marzo de 2022, el Parlamento de Navarra y la UNED suscribieron un Acuerdo Marco de colaboración para la realización de actividades de interés común, que se renueva anualmente.