Publicada el Miércoles, 6 de Febrero de 2019

La Comisión de Cultura visita el Museo de Navarra

Para conocer el estado y alcance del proceso de reformulación del proyecto museográfico, que contempla la actualización de una parte importante de la exposición permanente

La Comisión de Cultura, Deporte y Juventud ha visitado hoy, a petición del G.P. EH Bildu, el Museo de Navarra (1956), un espacio generalista que reúne piezas singulares del patrimonio navarro desde la prehistoria hasta el arte del siglo XX y que anualmente recibe entre 35.000 y 40.000 visitas, 41.923 en 2018, a las que hay que añadir 9.074 usuarios.

 

Los miembros de la Comisión que han asistido han sido Mónica Doménech (G.P. UPN), Consuelo Satrustegi, Virginia Alemán (G.P. Geroa Bai), Miren Aranoa, (G.P. EH Bildu), Mikel Buil, Fanny Carrillo (G.P. Podemos-Ahal Dugu-Orain Bai) y Carlos Gimeno (G.P. PSN).

 

La delegación del Parlamento ha sido recibida por Mercedes Jover, directora del Museo, Susana Irigaray, directora del Servicio de Museos de Navarra, y Marta Arriola, técnica del Museo y corresponsable del proyecto Todo el arte es contemporáneo.

 

La visita, según ha constatado Miren Aranoa a modo de preámbulo, ha tenido por objeto “conocer el estado y alcance del proceso de reformulación del proyecto museográfico que, entre otros, incluye la actualización de una parte importante de la exposición permanente, la adecuación de un nuevo espacio de almacén y la renovación de la fachada”. Y hacerse eco de las “necesidades” del Museo.

 

Seguidamente, los miembros de la Comisión han iniciado un recorrido guiado por los distintos espacios que conforman el museo, donde se hallan expuestas cerca de 6.000 de las más de 50.000 piezas que componen los fondos, sin contar los 50.000 volúmenes de su biblioteca especializada.

 

Así, tras visitar las salas expositivas, el almacén-archivo, los almacenes de escultura y pintura, además del depósito bajo cubierta, los Parlamentarios/as han tomado constancia del alcance del muestrario de un museo que, remodelado en 1990, tiene su origen en la pequeña galería abierta en la sede de la Cámara de Comptos en 1844.

 

En el transcurso de la visita, Susana Irigaray ha explicado la nueva oferta que, a partir del proyecto de renovación iniciado en 2017, tiene como finalidad abordar de otra manera la relación entre obra y visitante. A tal fin, se renuncia a la tradicional división entre épocas y estilos para, combinando obras medievales y modernas y abriendo nuevos espacios a otras disciplinas artísticas (música, danza, fotografía), mantener el interés y conectar con nuevos públicos.

 

En lo referido a la actualización de la exposición permanente, no sólo se apuesta por poner en valor la producción más reciente, sino que se hace a través de una fórmula que supone “toda una innovación en la forma de presentar las obras”. Esta previsión, que afecta al contenido de las plantas tercera y cuarta, se completa con la apertura de dos nueva salas para exposiciones de larga duración (entre mayo y marzo de cada año) como la que, desde octubre, exhibe Dora Salazar en la capilla. Dicho espacio será empleado los meses de abril para dar cabida a otras expresiones artísticas, como conciertos o exhibiciones de danza. La segunda zona, ya en la cuarta planta, se dedicará a muestras de fotografía, que tendrán carácter mensual a partir de octubre.

 

A decir de Mercedes Jover, “se ha buscado un cambio de discurso porque la museografía se había quedado anticuada, tanto en referido al contenido como a la presentación. El discurso ya no es cronológico ni estanco. Buscamos la convivencia entre todo el arte. Además, queríamos ganar espacio para el arte contemporáneo, una demanda desde los años 90. Seguimos barajando nuevos proyectos e iniciativas, pero la escasez de personal nos sigue limitando”.

 

Otras de las actuaciones tiene que ver con la adecuación del sótano como lugar de almacenamiento, conservación y seguimiento de bienes culturales. La idea es, “facilitar el acceso del personal investigador y, de forma puntual, del resto del público interesado”.

 

En cuanto a la fachada, se ha procedido a la limpieza de la piedra y a resaltar las letras grabadas. También se ha instalado una nueva puerta de bronce que permitirá aprovechar mejor el espacio de la entrada para la difusión y presentación de la programación. La rehabilitación del torreón de la capilla completa la intervención.

 

Concluida la reunión, los portavoces de la Comisión de Cultura, Deporte y Juventud han agradecido las explicaciones y han hecho acopio de información para, dado el caso, adoptar las iniciativas que correspondan.

 

Ubicado en el antiguo hospital de Nuestra Señora de la Misericordia, el Museo de Navarra (1956) cuenta con 25 personas en plantilla, de las cuales 17 son personal de atención de sala, dos auxiliares administrativos, un oficial de mantenimiento, una jefa de Negociado, una jefa de Sección y tres técnicos superiores. Su presupuesto para funcionamiento y actividad en 2019 es de 1.204.460 euros.

 

Exhibe joyas del arte medieval navarro que, como los capitales de la antigua catedral románica de Pamplona o la arqueta de Leire, conviven con creaciones del Renacimiento, del Barroco y otras más contemporáneas.

 

Además de obras de figuras clave de la pintura navarra como Javier Ciga o Jesús Basiano, el Museo cuenta con una colección contemporánea de artistas vinculados a Navarra (Martín Caro, Oteiza, Royo, Salaberri, Aquerreta o Manterola), amén de uno de los mejores retratos de Francisco de Goya, El Marqués de San Adrián.