El Presidente del Parlamento de Navarra, Alberto Catalán Higueras, ha asistido este miércoles al acto de entrega del Premio “Príncipe de Viana” de la Cultura 2014, que ha estado presidido por Sus Altezas Reales los Príncipes de Asturias y de Viana. El galardón, concedido por el Gobierno de Navarra, ha recaído en esta edición en el historiador capuchino Tarsicio de Azcona (de nombre civil Jesús Morrás Santamaría).

Por parte del Legislativo foral, también han acudido la Secretaria Primera de la Mesa, Maite Esporrín, y el Secretario Segundo Koldo Amezketa, además de parlamentarios de los diferentes grupos.

A su llegada al Monasterio, sus Altezas Reales han saludado a la comunidad benedictina y a los miembros del Gobierno de Navarra, encabezados por su Presidenta, Yolanda Barcina Angulo, quien, con motivo de cumplirse este año la XXV edición del premio, les ha entregado un grabado en seco con la efigie del primer Príncipe de Viana, que constituye la imagen del galardón.

El acto de entrega ha comenzado a las 11,30 horas en el interior de la iglesia abacial, en lugar de en el Patio de la Hospedería a causa de la meteorología, presidido por Don Felipe y Doña Letizia, con la presencia del premiado, la Presidenta de Navarra, los miembros del Gobierno, las principales autoridades políticas e institucionales de la Comunidad Foral, los miembros del Consejo Navarro de Cultura, y familiares y amigos del galardonado.

Tras la intervención de la Presidenta Barcina y la lectura del decreto foral de concesión del premio, Tarsicio de Azcona ha recibido de Don Felipe el diploma acreditativo del premio.

A continuación el premiado ha tomado la palabra, agradeciendo en primer lugar el galardón a las autoridades presentes, pero también a su Orden de capuchinos, al Centro Superior de Estudios Teológicos, colegas y alumnos, donde discurrió su docencia; “a todos los archivos, sobre todo pamploneses, y a las personas que los atienden”; “a mi pueblo de Azcona y mi verde valle campesino de Yerri, a ese singular monasterio de san Salvador de Leire que nos acoge y al Orfeón Pamplonés, que interpreta habitualmente tan elevadas melodías de los PP. Donostia y Lorenzo Ondarra, capuchinos”.

El Premio Príncipe de Viana 2014 ha continuado su discurso con un apunte personal: “Dejé la azada y me enfilaron hacia al claustro” –ha dicho-. “Soy el quinto de siete hermanos y provengo de una modesta familia campesina. Soy un renuevo del pueblo llano, el que más ha sufrido las calamidades, bélicas. Pero dejé la azada y la espuerta y después de 13 años de estudios en casas de la Orden, de 5 de universidad, de 40 de docencia y 60 de investigación, puedo continuar trabajando por la Iglesia y la cultura de España y de Navarra”.
Refiriéndose a su trabajo de investigador e historiador, Tarsicio de Azcona ha recordado la definición de Cicerón: ”La Historia, maestra de la vida”. Ha repasado los estudios realizados a lo largo de su fecunda carrera investigadora. “He sido feliz en la docencia y en la investigación”.

El Premio Príncipe de Viana 2014 ha terminado con un mensaje de aliento: “De mano de la paz y de la concordia, caminaremos hacia el bienestar. La historia es imparable y la hacemos entre todos”.

A continuación, Don Felipe ha pronunciado su alocución, en la que ha tenido palabras para felicitar y agradecer al historiador Tarsicio de Azcona su "obra ingente, producida a lo largo de una trayectoria tan fecunda". El Príncipe de Asturias y de Viana ha señalado que "el mejor conocimiento del pasado favorece que las sociedades avancen con paso firme hacia el futuro". En este sentido, ha añadido que, en periodos de dificultades, "la historia nos enseña que solo uniendo nuestros afanes, anteponiendo el bien común a los intereses particulares, e impulsando la iniciativa, la investigación y la creatividad de cada persona lograremos avanzar hacia escenarios mejores".