Publicada el Jeudi, 12 de novembre de 2020

Aprobada una resolución por la que se insta al Gobierno de Navarra a impulsar y apoyar la labor de la acción preventiva comunitaria

Se plantea la extensión del servicio a otras zonas geográficas y el concurso de expertos para hacer frente con nuevas propuestas a los deterioros asociados a la crisis del Covid

El Pleno del Parlamento ha aprobado hoy, con los votos a favor de PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Ahal Dugu e I-E y el voto en contra de Navarra Suma, una resolución por la que se insta al Gobierno de Navarra a “impulsar y apoyar la labor de la acción preventiva comunitaria para facilitar su extensión a otras zonas geográficas”.

 

La resolución aprobada incluye un segundo punto en el que, a su vez, se emplaza al Ejecutivo Foral a “trabajar conjuntamente con los equipos de prevención comunitaria y con personas expertas en la materia para elaborar nuevas propuestas de protección comunitaria que hagan frente a las situaciones generadas por la crisis de la covid-19”.

 

El texto original contenía un tercer punto, rechazado con el voto en contra de Navarra Suma y la abstención del PSN, conminando al Parlamento de Navarra a “reconocer y apoyar la labor realizada por los Servicios de Acción Preventiva Comunitaria en materia de protección a la infancia, como servicios de carácter esencial”. El respaldo de Podemos-Ahal Dugu a los titulares de la iniciativa, Geroa Bai, EH Bildu e I-E, ha resultado insuficiente.

 

En la exposición de motivos, la resolución impulsada por los G.P. Geroa Bai, EH Bildu y G-Mixto Izquierda-Ezkerra sitúa su iniciativa en la necesidad de “fortalecer la intervención comunitaria” en el marco del sistema de protección a la infancia, en un momento en el que los “confinamientos y las restricciones sociales han relegado el desarrollo socio-emocional al ámbito cerrado, que es donde se localizan la mayoría de las situaciones de desprotección y vulneración de derechos”.

 

En ese marco, se advierte de los riesgos derivados de la violencia intrafamiliar y social, del aumento exponencial del consumo de drogas y del desarrollo de enfermedades de salud mental, peligros todos que ponen en cuestión el desarrollo emocional de los menores, mediatizado en buena medida por los miedos, inseguridades y malos hábitos propios de ese entorno.

 

En ese sentido y a tenor de la lógica de la intervención comunitaria, se apela a la “prevención participada” a partir de la consideración del barrio como la “unidad territorial de atención básica y espacio de socialización”. Son los principios que, a decir de los proponentes, se recogen en el I Plan Municipal de Infancia y Adolescencia 2018-2022 del Ayuntamiento de Pamplona, cuyos ochos equipos del Servicio de Acción Preventiva Comunitaria (SAPC) acaban de ser suprimidos.