Pablo Quintana, distinguido con el X Premio del Aula de Derecho Parlamentario
Alberto Catalán advierte que las instituciones "no pueden convertirse en refugio de comportamientos alejados de los principios éticos", porque afecta a la credibilidad
El Parlamento de Navarra ha acogido hoy el acto de entrega del X Premio del Aula de Derecho Parlamentario, que ha recaído en Pablo Quintana, a quien el Presidente de la Cámara, Alberto Catalán, ha hecho entrega del galardón (dotado con 950 euros) por su trabajo sobre la Ética Parlamentaria.
Se da la circunstancia de que Pablo, estudiante de 4º de Derecho, también ganó el premio en 2010 con El lenguaje parlamentario.
El jurado, formado por Pablo Díez Lago, Letrado Mayor del Parlamento de Navarra, Manuel Pulido Quecedo, profesor de Derecho Parlamentario y Electoral de la Universidad de Navarra, y Asunción de la Iglesia Chamorro, profesora de Derecho Constitucional de la Universidad de Navarra, ha dejado constancia del “alto nivel” de los trabajos presentados.
El acto de apertura ha corrido a cargo del Presidente, Alberto Catalán, que ha comenzado felicitando a los premiados por el “esfuerzo analítico” realizado en torno cuestiones que atañen al derecho parlamentario y, por ende, al sistema democrático nacido de la Constitución de 1978.
A continuación, el Presidente ha hecho suya la “preocupación” que, de un modo “sustantivo”, pone de relieve el trabajo acerca de la “falta de confianza en la clase política” y, a ese respecto, ha instado a trabajar en la recuperación de la “credibilidad” de los representantes públicos, a día de hoy afectada por ciertos comportamientos “graves e inadecuados”.
En su afán de “vivificar” la democracia y al tanto de que la “corrupción y el fraude son ya el segundo problema nacional por detrás del paro”, Catalán ha advertido que las instituciones “no pueden convertirse en refugio de aquellos que no atienden los principios éticos que deben regir el recto proceder” de los aforados.
El Presidente ha hablado de “ transparencia, honestidad y servicio público” en cuanto ingredientes fundamentales del “buen gobierno”, de la “ética parlamentaria” inherente a las prácticas propias de una institución abocada a “revertir la “percepción de falta de integridad” que, debido a algunas “conductas individuales”, salpica al conjunto de sus representantes.
Así, para “fortalecer y mejorar” el modelo institucional y representativo, Catalán ha llamado a “reflexionar sobre métodos electorales y de participación” que permitan una relación “más fluida” entre la sociedad y los cargos electos, al entender que “no se ha inventado aún otro sistema que defienda mejor la pluralidad y la libertad de ideas”.
Alberto Catalán ha concluido agradeciendo al Rector el “acierto” en el impulso de una actividad que “contiene buena parte de las esencias” del Convenio que une al Parlamento y a la Universidad de Navarra.
Por su parte, el Vicerrector de Alumnos, Tomás Gómez Acebo, ha agradecido la “confianza, el compromiso y el interés del Parlamento y de su Presidente” en la Universidad de Navarra y se ha congratulado de la trayectoria de un galardón que, pensado para iniciar a los jóvenes en la investigación y el análisis, “va tomando cuerpo”.
“El tema elegido para el trabajo refleja una inquietud lógica, porque en las situaciones de crisis se acentúa la necesidad de introducir reformas, de repensar las instituciones, de optimizar los comportamientos”, ha significado Gómez Acebo.
Por último, Pablo Quintana a hecho un esbozo de lo que ha pretendido transmitir con el, a la postre, trabajo ganador. Su idea ha sido “constatar que la ética precisa de normas pero, sobre todo, de convencimiento personal. Urge corregir la degradación de los valores éticos, dada la sospecha existente en torno a la actividad política, que ahora se identifica más con el lucro personal que con la búsqueda del interés colectivo”, ha corroborado.
El ‘Aula de Derecho Parlamentario’ tiene como finalidad básica “ser un instrumento al servicio de la comunidad universitaria en general, destinado a profundizar en el estudio y conocimiento del sistema político y parlamentario”.
El Aula es gestionada libremente por el Departamento de Derecho Constitucional de la Universidad de Navarra, de la cual depende desde que fuera creada en 2002, fruto de un convenio con el Parlamento de Navarra.