La Comisión de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local ha visitado hoy, a petición del G.P. Socialistas de Navarra, el Centro de Recursos Ambientales de Navarra (CRANA), una fundación sin ánimo de lucro promovida por el Ejecutivo Foral y la empresa pública Gestión Ambiental de Navarra que, surgida en 2003 fruto de un proceso de participación social, emplea a 16 personas (10 de ellas en plantilla) y cuenta con la colaboración habitual de más de 80 profesionales del sector.

Los miembros de la Comisión que han asistido han sido Begoña Sanzberro, Carlos García Adanero, Jerónimo Gómez, Jesús Esparza (G.P. UPN), Carmen Ochoa (G.P. Socialistas de Navarra), Víctor Rubio (G.P. Bildu), Txentxo Jiménez (G.P. Aralar-Nabai) y Txema Mauleón (G.P Izquierda-Ezkerra).

La delegación del Parlamento ha sido recibida por Javier Asín, director-gerente, Fito Jiménez, responsable de proyectos, Elena Cereceda, responsable del programa de residuos, Rafa Aldai, responsable del área de cambio climático, Eva García, responsable del programa de agua, y Jorge Iriarte, documentalista.

El objeto de la visita, según ha constatado Carmen Ochoa a modo de preámbulo, ha sido “conocer los principales proyectos que trabajan en la actualidad, así como los planes de futuro, tras la decisión del Gobierno de Navarra de suprimir la Fundación”.

A continuación, los Parlamentarios han realizado un recorrido guiado por las distintas dependencias del CRANA, que cuenta con una exposición permanente en la planta baja, una sala de usos múltiples y un Centro de Información y Documentación Ambiental que, según ha precisado Jorge Iriarte, pasa por ser el único de estas características en Navarra (funciona como cualquier biblioteca pública y alberga más de 7.000 documentos, libros, y audiovisuales especializados).

Seguidamente, se ha celebrado una reunión en la que se ha expuesto el trabajo y los proyectos realizados en las principales áreas temáticas que trabaja el CRANA: Cambio Climático, Energía y Movilidad Sostenible; Agua y voluntariado ambiental en ríos; Residuos; y gestión ambiental y Responsabilidad Social Corporativa en empresas.

Asimismo, se han comentado los servicios de información y participación pública que, en cumplimiento de las leyes actuales, ofrece el CRANA, que a su vez brinda formación y asesoramiento.

En lo que a la financiación respecta, Fito Jiménez ha señalado que entre 2004 y 2014 los proyectos del CRANA han captado 3.535.030 euros de fondos europeos, a una media anual de 325.000 euros, 130.000 euros por encima de la cifra media con la que el Gobierno de Navarra ha venido cofinanciando las actividades de la Fundación. “Por cada 100 euros invertidos en el CRANA 90 provienen de Europa, de ahí que en los últimos cinco años el porcentaje de autofinanciación se haya situado en el 58%”, ha significado.

En lo concerniente al futuro, Javier Asín ha advertido que prescindir del CRANA supone “renunciar a un centro con capacidad para liderar y gestionar proyectos europeos y suministrar apoyo a otras entidades en innovación social. Se trata, en definitiva, de funciones y servicios imprescindibles para avanzar en la sostenibilidad ambiental y en la construcción de un nuevo modelo de desarrollo más sostenible para Navarra.

En ese sentido, Asín ha subrayado que la desaparición del CRANA, además de “unilateral y no justificada desde el punto de vista económico, devuelve la Educación Ambiental en Navarra al año 1998, con el consiguiente alejamiento de las recomendaciones europeas, especialmente firmes en lo tocante a implicar y corresponsabilizar a la sociedad y sus organizaciones”.

Así, tras dejar constancia de que “las funciones y servicios clave del centro no pueden ser asumidos por la iniciativa privada”, Rafa Aldai ha dado cuenta de la última reunión mantenida con el Consejero hace unos 20 días y en la que “nos ratificó su intención de cerrar el CRANA a final de año, una vez que terminemos con todos los proyectos europeos en marcha. Se está procediendo a un desmantelamiento desordenado”.

Finalmente, Asín se ha dirigido a los portavoces parlamentarios para solicitar su “implicación, más como defensa de un servicio difícil de recuperar una vez deshecho que como mero acto de oposición al Gobierno”.

En su turno de intervenciones, los portavoces de UPN, SN, Bildu, Aralar-Nabai e I-E han coincidido a la hora de valorar la importancia del CRANA y han abogado por recuperar la interlocución con el Departamento o, de no prosperar, por buscar alguna fórmula extraordinaria que garantice la pervivencia de la Fundación.

Carmen Ochoa (G.P. Socialistas de Navarra), ha afirmado que “lo primero es intentar convencer al Consejero para que les deje participar en todos los proyectos europeos, así como en los trabajos pendientes. No se puede dejar escapar la oportunidad de recaudar fondos, porque eso significa sostenibilidad, autonomía financiera. Creo que es una decisión de la Presidenta, más que del Departamento”.

Jerónimo Gómez (G.P. UPN) ha manifestado que, “a nivel personal y más allá de lo estrictamente económico, no entiendo el motivo del cierre. Metieron a todas las fundaciones en el mismo saco, pero hay que intentar reconducir el tema. La solución pasa por seguir dialogando. Volveré a trasladar la inquietud al Consejero. Entiendo la sensación de desmantelamiento”.

Víctor Rubio (G.P. Bildu) ha sostenido que, “de consumarse, se va a perder una herramienta que, tarde o temprano, con UPN o con otro Gobierno, habrá que restaurar. Deberíamos ser capaces de juntarnos los grupos parlamentarios con el Consejero a ver qué clase de acuerdo se puede alcanzar. Es una decisión equivocada, sin duda”.

Txentxo Jiménez (G.P. Aralar-Nabai) se ha referido al CRANA en términos de “símbolo, de valor añadido al margen de las diferencias políticas. No creo que desde el Departamento se pueda ofrecer la misma calidad, variedad y diversificación de funciones. Apostamos por su continuidad en los términos actuales, ya sea como Fundación o bajo alguna otra fórmula extraordinaria que, quizás, haya que buscar para condicionar la determinación del Gobierno”.

Txema Mauleón (G.P. Izquierda-Ezkerra) ha declarado que se trata de “una de las decisiones más irracionales que he visto en estos tres años de legislatura. No hay un solo argumento que avale su desaparición, ni siquiera el económico, pues no existe un solo Departamento capaz de autofinanciarse en un 58%. Es un absurdo, ha sido la interlocución del Gobierno en materia ambiental. Pero se ha optado por mezclar al INAAC y al CRANA, las únicas que aportan, junto al resto de fundaciones, que sí son unas reliquias a extinguir”.