La comisión de Cohesión Territorial visita las carreteras N 113, NA 5202 y NA 126
Para conocer los “puntos críticos” de las carreteras más afectadas por las crecidas del río Ebro
La Comisión de Cohesión Territorial ha visitado esta mañana las carreteras N 113, NA 5202 y NA 126 en la Ribera, tres vías que suelen verse afectadas y cerradas al tráfico por el desbordamiento del río Ebro.
Los miembros de la Comisión que han asistido han sido Javier García, Yolanda Ibáñez (G.P. Navarra Suma), Jorge Aguirre (G.P. PSN), Mikel Asiáin (G.P. Geroa Bai) y Txomin González (G.P. EH Bildu).
La delegación del Parlamento ha sido recibida por Pablo González, director de servicio de conservación del Departamento de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra.
El objeto de la visita, cursada a petición de Navarra Suma, ha sido “acercarse a los puntos críticos de las carreteras que se cierran al tráfico cada vez que hay una crecida del río Ebro, y conocer los planes y las actuaciones previstas”.
La visita ha dado comienzo en la salida a Castejón hacia Madrid y Pamplona, entre los km 75 y 77 de la N 113. La rotura de los diques aguas arriba hace que el agua cubra el asfalto, por lo que desde 2003 se ha cortado al tráfico 15 veces, las dos últimas veces en el plazo de un mes (diciembre de 2021 y enero de 2022). Calculan que la vía ha estado cerrada un total de 146 días.
Tal y como ha explicado Pablo González, director de servicio de Conservación, se trata de uno de los puntos “más críticos” de toda Navarra porque afecta a la carretera nacional Pamplona-Madrid. Existe un proyecto de 2007 para elevar la calzada en un tramo de 2 km y evitar que se vea afectada por el agua. La obra se valoró entonces en 4,3 millones de euros, pero no se llevó a cabo.
González ha añadido que la elevación de la vía, además de su “elevado coste”, supondría la creación de presas a los dos lados y dificultaría la salida del agua, por lo que sería necesario adecuar nuevos pasos de agua. Por ello, aboga por actualizar dicho proyecto y por realizar limpiezas estratégicas del cauce bajo criterios técnicos y medioambientales.
A continuación, la delegación se ha trasladado a la NA 5202 entre Ribaforada y Fustiñana, una vía construida en 2003 que, “debido al mal estado en que se encuentran los diques y las motas de las localidades de Cabanillas y Ribaforada”, se ve obligada a su corte cuando el agua supera sus cauces, dejando incomunicados los municipios Fustiñana y Cabanillas.
Para finalizar la visita, los miembros de la comisión se han desplazado a la carretera NA 126 entre Cabanillas y Tudela de Navarra, una carretera construida en 2007 y que se ha visto afectada por las crecidas del Ebro. En diciembre de 2021, el cierre del tráfico de esta vía implicó que Cabanillas y Fustiñana quedaran prácticamente aislados, puesto que no podían llegar a la margen derecha del Ebro (hacia Tudela o Ribaforada) salvo realizando 70 kilómetros yendo hasta Gallur (Aragón) y tomando allí la autopista para volver en dirección a la capital ribera.
Al no existir actualmente estudios ni proyectos para realizar adecuaciones con el objetivo de evitar el cierre de estas vías cada vez que haya una crecida del río, González aboga por la limpieza del cauce y los dragados como fórmula más adecuada y eficiente.