El Parlamento de Navarra se adhiere al Día Nacional de las Lenguas de Signos Españolas
Hualde llama a seguir derribando barreras para hacer efectiva la igualdad de derechos y urge al desarrollo reglamentario de la Ley estatal para no discriminar a las personas sordas
El Parlamento de Navarra ha celebrado hoy junto a ASORNA un acto institucional de adhesión al Día Nacional de las Lenguas de Signos Españolas, una efeméride instituida en 2014 para, coincidiendo con el 78 aniversario de la constitución de la Confederación Estatal de Personas Sordas (CNSE), impulsar medidas tendentes a normalizar el uso de estas lenguas más allá de los ámbitos domésticos, educativos y sociosanitarios.
Así lo ha corroborado el Presidente del Parlamento, Unai Hualde, quien ha subrayado el “derecho” que asiste a las personas sordas a “contar con las mismas oportunidades sanitarias, educativas y laborales que el resto de la población, con el fin de poder disfrutar de una vida plena. Es verdad que se ha avanzado mucho, también a nivel institucional y de medios de comunicación, donde cada vez resulta más habitual el empleo de la lengua de signos”.
No obstante y pese evidentes progresos llevados a cabo al amparo de la Ley estatal 27/2007, donde “se reconocen las lenguas de signos españolas y se regulan los medios de apoyo a la comunicación oral, la ausencia de desarrollo reglamentario supone un lapsus que, a decir del Presidente, pone en cuestión la “voluntad política. Confiamos en que se den los pasos necesarios para, sobre todo, no discriminar a las personas sordas. Agradecemos a Asorna su interés en contar con el Parlamento para la realización de este acto. Eskerrik asko”.
A continuación, Franscisca Pulgarín, secretaria de la Asociación de Personas Sordas de Navarra (ASORNA), ha insistido en que los derechos lingüísticos son la puerta a través de la que los ciudadanos sordos acceden al resto de derechos, porque sin lenguas de signos no podemos ejercerlos. Allí donde haya una persona sorda, deben estar nuestras lenguas como única garantía de accesibilidad lingüística”.
A ese respecto y a un a sabiendas de que la Ley 27/2007 supuso un “gran avance”, Pulgarín ha llamado a las distintas Administraciones Públicas a “tomar conciencia y situar las lenguas de signos en el eje de cualquier política pública. Es preciso normalizar su uso, al objeto de garantizar el rigor lingüístico y su equiparación a las lenguas orales. Defendemos el derecho a comunicarnos sin que se nos penalice ni discrimine por hacerlo en lenguas de signos. Esperamos que el desarrollo reglamentario de la Ley 27/2007 vea por fin la luz”.
El acto de ha contado con la asistencia, entre otros, de Inma Jurío, vicepresidenta primera, Juan Luis Sánchez de Muniáin, secretario primero, María Solana (Geroa Bai), Txomin González (EH Bildu) y Mikel Buil (Podemos-Ahal Dugu).